Es hora de volver a casa, el tiempo ha llegado y, aunque no estoy listo, todo ha sido dispuesto ya.
Es hora de volver a donde todos me conocen y donde nadie me conoce.
Es hora de volver a casa, las campanas llaman por mí.
Me invade la nostalgia y mi corazón se acongoja, recuerdos de los días pasados, charlas con las pocas amistades.
Estoy triste por todo lo que se queda, estoy triste por la parte de mí que dejo atrás...
Es tiempo de volver a casa, de ocupar mi lugar a la derecha de mi padre, de ocupar el lugar que corresponde en mi familia.
Las campanas llaman por mí... No estén tristes, el tiempo pasa y no perdona a nadie... Estoy feliz por todo lo que frente a mi se va a presentar...
No todo es tristeza. Las campanas llaman por mí y escucho las voces que me llaman a casa... Soy feliz por el sitio a donde voy... Y estoy feliz por todo lo que conocí.
Nada es tristeza, las campanas dicen mi nombre... A casa voy.
Ricardo Gómez Guerra... Primavera del 2018